Las infecciones de transmisión sexual son más frecuentes de lo que podemos pensar, especialmente entre los jóvenes y quienes tienen relaciones sexuales con varias parejas sin protección. Las ITS más comunes afectan cada vez a más personas y contagiarse es muy sencillo, basta con tener sexo vaginal, anal u oral sin protección con una persona infectada para estar en riesgo. Solo un encuentro es suficiente.
Cualquier ITS representa un riesgo, pero algunas son más frecuentes que otras. ¿Sabes cuáles son las infecciones de transmisión sexual más comunes y cuál es el modo adecuado de protegerse para evitar su contagio? Sigue leyendo y descúbrelo en este artículo.
¿Cuáles son las ITS más comunes?
Una infección de transmisión sexual es aquella que se contagia durante el sexo vaginal, oral y anal a través de fluidos como el semen, el flujo vaginal o la sangre de una persona infectada a otra. Las ITS pueden estar producidas por cuatro agentes diferentes: bacterias, hongos, virus y parásitos.
Actualmente existen más de 20 tipos distintos de infecciones de transmisión sexual. Sin embargo, algunas de ellas son más frecuentes que otras. A continuación, te explicamos cuáles son las ITS más comunes en España:
Virus de Papiloma Humano (VPH)
Se trata de la ITS más común en España, según la Academia Española de Dermatología y Venerología, el VPH afecta a 1 de cada 4 adolescentes, y no solo en nuestro país, pues además es de una de las ITS más frecuentes a nivel mundial.
El VPH es una infección que puede estar provocada por los diferentes tipos de virus del papiloma humano, lo cuales pueden clasificarse en dos tipos: de bajo riesgo y de alto riesgo.
Esta ITS puede contagiarse a través de las relaciones sexuales (ya sea vaginal, anal u oral) sin usar ningún tipo de protección con la persona que ya tiene el virus y aunque no tiene un tratamiento específico aún, es importante acudir al urólogo o ginecólogo para prevenir consecuencias graves como la aparición de algunos tipos de cáncer como el cervical o de cuello uterino.
Si buscas más información sobre esta infección, te invitamos a leer nuestro artículo VPH: contagio, síntomas y tratamiento.
Clamidia
Según el Centro nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos II, en 5 años las infecciones por clamidia han crecido en 654% en España, con 131 millones de personas infectadas cada año de acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud.
La clamidia es una infección bacteriológica que puede afectar a distintas zonas del cuerpo. Concretamente, en el caso de las mujeres es más común en zonas como el recto, la garganta y el cuello del útero y, en cambio, en el caso de los hombres es más frecuente en partes como la uretra, la garganta y el recto.
Esta afección puede contagiarse si mantenemos relaciones vaginales, anales u orales con una persona infectada, por lo que si tenemos sexo sin protección es importante acudir al médico, ya que de no ser tratada a tiempo puede producir consecuencias graves en la salud, como infertilidad o la aparición de un embarazo ectópico.
Encuentra más información en nuestro artículo Clamidia: contagio, síntomas y tratamiento.
Herpes Genital
El herpes genital es otra de las infecciones de transmisión sexual más frecuentes pudiendo ser causada por dos tipos de virus: el VHS-1, que afecta a boca y labios pero puede contagiarse a los genitales, y el VHS-2 que provoca el herpes genital y que puede transmitirse tanto a través del contacto con la piel del afectado como a través de sus secreciones genitales y orales. Aunque actualmente no existe una cura para el herpes, es importante acudir al médico para reducir tanto la aparición de úlceras como de sus brotes.
Para más información , consulta nuestro artículo sobre el herpes genital.
Gonorrea
En 5 años los casos de gonorrea han crecido un 303% en España, con 78 millones de infecciones a nivel mundial cada año según la OMS.
La gonorrea es una infección causada por la bacteria Neisseria gonorrhoeae que provoca infecciones en zonas como los genitales, el recto y la garganta y que se contagia a través de las relaciones vaginales, orales y anales sin protección con una persona infectada. Es importante tratar esta ITS a tiempo porque puede producir, en etapas avanzadas, una inflamación dolorosa en los conductos de los testículos e infertilidad, y esto último en el caso de las mujeres.
Descubre, en este artículo, toda la información acerca de la gonorrea.
VIH
El Virus de Inmunodeficiencia Humana o VIH es una de las infecciones de transmisión sexual de alto riesgo más conocidas, afectando, según datos de ONUSIDA, a 37.9 millones de personas alrededor del mundo.
Esta infección puede permanecer durante años en nuestro organismo sin manifestar síntomas, por ello los exámenes de detección periódicos resultan esenciales para identificar su presencia, especialmente si mantenemos relaciones sexuales sin protección o tenemos un amplio número de parejas sexuales.
Para saber más acerca de esta ITS te invitamos a leer nuestros artículos VIH: contagio, síntomas, tratamiento y prevención y Cuál es la diferencia entre VIH y Sida.
Sífilis
La sífilis es una ITS causada por la bacteria Treponema pallidum y se puede contagiar a través del contacto con una de las llagas ubicadas en la boca o los genitales de la persona infectada a través de las relaciones sexuales sin protección, especialmente en el sexo oral. Es importante tratar esta infección a tiempo porque en sus últimas etapas puede producir daños cerebrales, ceguera y/o parálisis.
Clica aquí para conocer el contagio, síntomas y tratamiento de la sífilis.
Tricomoniasis
La tricomoniasis es una ITS causada por el parásito Trichomonas vaginalis que puede contagiarse a través de las relaciones sexuales vaginales sin protección. Esta infección requiere tratamiento médico para evitar algunas consecuencias, como el aumento del riesgo de contraer VIH o la aparición de otras infecciones secundarias.
Si quieres conocer más acerca de esta infección venérea, consulta el artículo Tricomoniasis: contagio, síntomas y tratamiento.
Estas son las ITS más frecuentes, pero no son las únicas. Otras, pueden causar daños irreversibles en importantes órganos de nuestro cuerpo, como es el caso de la hepatitis B, mientras que el virus de inmunodeficiencia humana o VIH puede acabar con nuestra vida al debilitar por completo el sistema inmune. Aunque son menos frecuentes que las mencionadas anteriormente, no quiere decir que no podamos contraerlas. Mantener sexo vaginal o anal sin condón o sexo oral sin barreras bucales, especialmente con múltiples parejas, nos pone en riesgo de contagiarnos de cualquier infección de transmisión sexual.
¿Cómo protegerme de las infecciones de transmisión sexual?
Ahora que ya sabes cuáles son las infecciones de transmisión sexual más comunes, es importante que tengas claro cómo protegerte de ellas.
Uno de los factores de contagio principales es el sexo sin preservativo o el uso inadecuado del condón, por lo tanto, es importante que usemos adecuadamente el condón durante todo el encuentro sexual, especialmente si tenemos varias parejas sexuales.
Sin embargo, este método puede perder toda su eficacia si lo utilizamos incorrectamente, por lo que también es imprescindible tomar medidas a la hora de usarlo como comprobar su fecha de caducidad, colocarlo de forma correcta y utilizarlo a lo largo de toda la relación sexual.
En nuestro artículo cómo poner un condón te explicamos el modo en el que debes colocarlo, además en nuestro artículo por qué se rompen los preservativos encontrarás información de las causas más frecuentes por las que esto ocurre y cómo evitarlas para incrementar las posibilidades de estar protegido.
Además, para prevenir una ITS, es recomendable:
- Usar barreras bucales o condones para el sexo oral, así reduciremos la posibilidad de contagiarnos por esta vía.
- Limitar el número de parejas sexuales y usar siempre el condón en cada encuentro sexual, especialmente si tenemos distintas parejas.
- Realizarnos chequeos anuales para descartar las ITS si mantenemos una vida sexualmente activa.
- No tener sexo si detectamos una lesión genital en la otra persona, por ejemplo una herida, brote de herpes o chancro.
- No compartir objetos personales que entren en contacto con la sangre, como los cepillos dentales, cuchillas o jeringas, pues ITS como el VIH y la hepatitis se transmiten también por esta vía.
También es importante que, si sospechamos que hemos contraído una ITS, acudamos a un especialista, como un ginecólogo, un urólogo o un dermatólogo, dependiendo del caso, para que nos realice las pruebas pertinentes. En nuestro artículo Diagnóstico de las ITS: pruebas y a qué médico ir te damos más información.
¿Puedo saber si alguien tiene una ITS a simple vista?
En la mayoría de lo casos la respuesta es no. A menos que la persona infectada haya contraído herpes genital y tenga un brote en el momento del encuentro, o padezca de sífilis y tenga un chancro en la zona genital, saber si una persona tiene una ITS a simple vista no suele ser posible.
Por eso es tan importante tener en cuenta que las ITS son más comunes de lo que pensamos y usar el condón en cada encuentro sexual. ¡Protegerte está en tus manos!
Fuentes:
- Nota de prensa de la Academia Española de Dermatología y Venerología, 8 de agosto de 2016
- Organización Mundial de la Salud, fact sheets STIs
- Centro nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos II. Resultados de la vigilancia epidemiológica de las enfermedades transmisibles. Informe anual 2014
- UNAIDS, 2019 Global HIV Statistics